El español que jamas invento la bombilla OSRAM
octubre 27, 2006 – 1:20 AMSantiago Amón, que en paz descanse, nos contaba en un articulo sobre el Guernica de Picasso lo siguiente:
Españolísima bombilla, por cierto; pues la bombilla que ha pintado Pablo Picasso, no puede ser sino española. Es una bombilla «0sram».
En nuestro país surge, de vez en cuando, un inventor. Y aconteció que un hispano dedicado a la invención, diseñó un buen día esta bombilla. El hombre, que se apellidaba «Ramos», debió de plantearse lo siguiente: con este apellido, no vendo ni una bombilla. Así que alteró el orden de las letras, y su bombilla terminó llamándose «Osram». Como quiera que el nombre parece alemán, el individuo sigue vendiendo bombillas.
Se referia a la bombilla que aparece en el cuadro. Parece ser que la anécdota forma parte de una leyenda urbana, pues segun cuentan los de OSRAM SYLVANIA
The OSRAM name was registered in 1906 by Auer-Gesellschaft. The name OSRAM derives from the names of two elements: Osmium, a metal; and Wolfram, the German word for tungsten. The company had been a pioneer in the development of the Osmium lamp and the tungsten filament lamp.
Pues eso, que el nombre viene de Osmium (Osmio) y Wolfram (Wolframio, tambien conocido como tungsteno).
Y ya que estamos con este tema, voy a aclarar quien fue el inventor de la bombilla.
Heinrich Goebel en el año 1854 construyó lo que muchos consideran la primera bombilla, introduciendo un filamento de bambú carbonatado dentro de una botella vacía para evitar la oxidación. Continuó con el desarrollo durante los cinco años siguientes, logrando que funcionara hasta 400 horas. No solicitó una patente inmediatamente, pero en 1893 (el mismo año de su fallecimiento) fue admitido su invento como anterior al de Edison.
Pero la patente se concedió a Thomas Alva Edison, pues fue el primero que consiguió un diseño comercialmente viable.
Heinrich Göbel solicito la patente por la invención de la primera bombilla de luz de uso práctico, la que había diseñado en 1854, 25 años antes de que Edison la patentara. En 1893, cuando Edison finalizaba otras disputas legales sobre el mismo tema, preparándose para obtener los beneficios de su invención, Goebel presentó una nueva disputa legal en la Oficina de Patentes de Estados Unidos. Antes de ello, Göbel había hecho una oferta para vender su invención a Edison en 1882 por unos cuantos miles de dólares, pero Edison no encontró suficientes méritos en el invento, por lo cual se negó a aceptar la oferta. Después de una muy completa revisión del caso, y dándole enorme ventaja sobre los argumentos de la defensa de Göebel, el Juez Colt dio su opinión en este sentido: “Es extremadamente improbable que Henry Goebel construyera una lámpara incandescente práctica en 1854. Esto es manifiesto en la historia de la técnica durante los pasados cincuenta años, en que las leyes eléctricas que fueron descubiertas desde ese tiempo como aplicables a la lámpara incandescente, los medios imperfectos para obtener el vacío, el alto grado de habilidades necesarias para la construcción de todas sus partes, y los instrumentos inadecuados con los que Göebel trabajó”. Unos meses después de que una Corte estableciera la prioridad de Edison, Göebel murió de pulmonía, siendo sepultado en el cementerio Green-Wood, en Brooklyn. Nueva York.
Edison dio con el filamento adecuado asi:
[…] cuando tenía 32 años, durante ochocientos días y ochocientas noches, secundado por sus más fieles colaboradores, tuvo la paciencia de ensayar seis mil fibras diferentes: vegetales, minerales, animales y aún humanas, pues hasta un pelo de la barba rojiza de uno de sus asistentes se utilizó en los experimentos. El recipiente, un pequeño globo de vidrio que le había valido meses de trabajo, estaba listo, pero no había podido encontrar aún el filamento capaz de resistir la incandescencia por mucho tiempo.
Mientras leía a la luz de una lámpara de petróleo, su mano se untó con hollín al tocarla sin querer. De pronto pensó que sólo un filamento carbonizado podría mantenerse largo tiempo incandescente sin destruirse, siempre que estuviera en el vacío. Su primera bombilla se componía de un hilo de carbón dentro de una ampolla de vidrio vaciada de aire.