La abeja Maya, su hijo bastardo y la denostada imagen de su amigo Willy
mayo 24, 2006 – 7:47 AMEl siguiente video corresponde a una serie de fracasados intentos de promocion del desaparecido grupo musical cuyo nombre da titulo a este articulo. Los miembros de la banda no repararon en gastos con el fin de conseguir una campaña promocional efectiva: la Fender del guitarrista, uno de los tambores del bateria y el coche del cantante fueron materialmente sacrificados para la realizacion del videoclip; un error organizativo que tornó a lamentable falta de prevision cuando un suculento contrato para realizar 50 conciertos por toda España no pudo ser finalmente firmado debido a que el grupo reconocio no disponer ya de los instrumentos ni del vehiculo necesarios para realizar la gira.
Las novisimas tecnicas de marketing viral les habrian asegurado en aquestos tiempos que corren un exito semejante al que ha cosechado el autor de la cancion «Opa, voy a haze un corra«. Pero en 1998, la ausencia de la actual masa de bitácoras no permitía aun la difusión exponencial de chorradas mediante el «boca a boca» («hiperenlace a hiperenlace» que dirian los putos frikis). El video fue correctamente concebido de acuerdo a los cánones imperantes de una época en la que el éxito internetero se materializaba en aquellas típicas animaciones en las que un hamster explotaba dentro de un microondas una vez el aparato era puesto al nivel de potencia «Descongelar Chuleta». Eran otros tiempos. En la red se respiraba un envidiable aire de libertad que se celebraba compartiendo ramalazos de salvajismo animal y crueldad enfermiza, pero el entramado popular de difusión no estaba, como ya he dicho, aun organizado ni técnicamente sustentado.
El sistema capitalista, del que otrora renegaran, ha acabado engullendo y finalmente vomitando las ansias de fama de los protagonistas de este articulo. Pancho, el bateria, trabaja como reponedor para la conocida cadena de hipermercados Carrefour; Lolo, el cantante, ayuda a su madre en la peluqueria que ella misma regenta; y Felipin, el guitarrista, realiza actualmente un cursillo de la CCC sobre diseño en HTML de paginas web. En las ociosas tardes dominicales, cuando se reúnen con la pandilla de amigos a la que suelen referirse como «la megapandi», si asoma algún invitado suelen buscar una excusa para mostrarle el video que atesoran como muestra de su efimera carrera musical (frustrada por el infortunio, según defienden ellos). Entonces una mal dibujada mueca de asombro en el rostro del ocasional espectador termina dando paso a un lacónico y forzado: «¡Que guay!», el cual substituye a unas frases oportunamente reprimidas: «¿¡Pero de verdad erais así de gilipollas!? ¿Pero que cacho de mierda es esta, tios?»
One Response to “La abeja Maya, su hijo bastardo y la denostada imagen de su amigo Willy”
Me ha parcido que suena Sakira al final del video.
Puede que no sea tan viejo
By azid korporation on Nov 24, 2008 at 8:10 PM